La Unión Nacional de Trabajadores Ferroviarios, Marítimos y del Transporte (RMT) y la Asociación de Personal Asalariado del Transporte (TSSA), ambas afiliadas a la ITF, iniciaron el martes por la tarde la primera de las dos huelgas de 48 horas que tienen convocadas como protesta contra el cierre de las taquillas de venta del metro, que supondrá la destrucción de unos 1000 empleos en toda la red del metro de Londres, Reino Unido.
Los sindicatos afirman que, a pesar de todos sus esfuerzos por reunirse con el alcalde de la ciudad, Boris Johnson, este se niega a tratar las repercusiones que tendrían sus recortes. Ambos sindicatos, junto a otras asociaciones de la comunidad, expresan su alarma por las repercusiones que podrían tener estos recortes y advierten que algunas estaciones del metro que quedarán sin personal serán “paraísos de atracadores”. Antes de su elección en 2008, el alcalde aseguraba que mantendría abiertas todas las taquillas del metro para garantizar la seguridad de los pasajeros y pasajeras – y los sindicatos quieren que cumpla su palabra.
Una encuesta independiente realizada por la RMT revela que 65% de los usuarios del metro considera “justificado” recurrir a una huelga legal como último resorte. Casi nueve de cada diez piensan que el alcalde debería hablar con los sindicatos sin condiciones previas si ello impide la huelga.
ITF envió el miércoles una delegación internacional al piquete montado en la estación de metro Elephant and Castle, compuesta por miembros de sindicatos de 10 países. Los miembros de TSSA y la RMT en huelga recibieron también mensajes internacionales de apoyo, como el de la Federación Coreana de Servicios Públicos y Sindicatos de Trabajadores del Transporte (KPTU), cuyos miembros del sector ferroviario están en lucha contra la privatización y la reestructuración de su red. En la carta, el presidente del KPTU, Lee Sang Moo, estableció un paralelismo entre ambas luchas: “Sabemos que se precisa mucho coraje para movilizar y convocar una huelga. Su voluntad de oponer resistencia ante la injusticia es una fuente de inspiración para nosotros”.
Steve Cotton, secretario general en funciones de la ITF, afirma: “Mantenemos nuestro firme apoyo a las medidas legítimas y legales adoptadas por nuestros compañeros y compañeras de la RMT y la TSSA durante la huelga. Estos trabajadores y trabajadoras, al secundar la huelga, están perdiendo parte de su salario para luchar por nuestro transporte público — una huelga que podría haberse evitado si el alcalde hubiera aceptado la oferta de diálogo del sindicato. Esperamos que el conflicto se resuelva antes de las movilizaciones previstas para la próxima semana — pero si no, volveremos al piquete a demostrar nuestra solidaridad una vez más”.
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