La delegación internacional de alto nivel que está investigando los ataques contra la Unión Coreana de Trabajadores Ferroviarios (KRWU) condenó la “persecución” a la que están siendo sometidos los responsables de este sindicato. La delegación estaba compuesta por el representante jurídico de la ITF, Ruwan Subasinghe, así como representantes de la Confederación Sindical Internacional (CSI), de la Comisión Sindical de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y de la Internacional de Servicios Públicos.
La delegación, luego de visitar a los cinco responsables sindicales encarcelados en Seúl para expresarles su apoyo y solidaridad, subrayó en un comunicado que la huelga en la que participaron cumplía todos los requisitos de procedimiento que exige la ley coreana, además de tratarse de una huelga totalmente legal según el derecho internacional. Condenó la decisión del tribunal coreano de mantener la orden de arresto aun cuando los dirigentes se habían entregado voluntariamente a la policía.
ITF, conjuntamente con la CSI, tiene ahora la intención de presentar una queja ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) contra estas violaciones de las normas internacionales del trabajo. ITF expondrá también el asunto ante la OCDE.
Luego de las jornadas internacionales de acción de diciembre y enero, ITF tiene previsto movilizar a sus miembros del mundo entero para que tomen todas las medidas autorizadas por la ley, necesarias para denunciar y poner fin a las prácticas antisindicales del gobierno surcoreano.
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